Membrillo on tour: la presencia del membrillo en el mundo
En este blog hemos hablado mucho del membrillo, tanto de su versatilidad a la hora de incluirlo en infinidad de recetas como ensaladas, sándwiches o platos principales, como de sus grandes beneficios nutricionales. Está tan presente en nuestra cultura que, en muchos casos, lo hemos conocido a través de nuestros abuelos y estos, a su vez, de los suyos.
Membrillo y Santa Teresa son conceptos inseparables desde hace décadas, pero es interesante descubrir que también es patrimonio de otros lugares del planeta. Ponte el cinturón y acompáñanos en este viaje gastronómico a la fascinante cultura del membrillo.
Grecia y sur de Europa
Grecia es la cuna del membrillo a nivel mundial y hoy en día sigue teniendo gran importancia en su dieta. Tanto es así que en esta región se conoce al membrillo como la “manzana de la miel” y ha estado presente en muchos iconos del arte y la mitología griega. De hecho, el tan popular relato de “la manzana de la discordia” que propicia la guerra entre Atenas y Troya, se cree que en realidad tuvo como protagonista al membrillo, puesto que eran los novios quienes las tomaban en las bodas antes de la noche nupcial. Esta escena, que ha sido plasmada por pintores de la talla de Rubens, muestra a la diosa Eris dejando en el suelo esta “supuesta manzana” en la boda del padre de Aquiles, a la que no fue invitada.
En la actualidad son muchas las recetas de membrillo que se conservan en el sur de Europa. En Serbia, por ejemplo, es típico el aguardiente elaborado con esta fruta, uva y hierbas aromáticas, y en el país heleno se toma guisado con carne.
Oriente Medio
Pero si bien es cierto que el membrillo se popularizó en Grecia, no lo es menos que llegó hasta allí procedente de Asia, siguiendo la ruta tradicional a través de países como Egipto, Turquía e Israel.
Es en este último donde tiene unas raíces más fuertes, de hecho, se menciona varias veces en las escrituras judías antiguas como asphargal y p’rish. Hoy en día es muy importante dentro de la cocina sefardí y existen recetas que datan del siglo XII, donde el membrillo se cocina con cordero estofado o escalfado con crema batida.
Además, en la tradición israelí, el dulce de membrillo se presentaba en un cuenco dorado con cucharas de plata y servía para pedir deseos antes de una comida familiar. Mientras, en la cocina árabe como la turca o la egipcia, se utiliza principalmente en la repostería, incluyéndose en pastas o dulces típicos.
Argentina y Chile
Del mismo modo que el membrillo llegó a Europa a través de Oriente Medio, fuimos los españoles quienes llevamos el membrillo al Nuevo Mundo. Desde entonces se ha asentado con fuerza en América del Sur, donde al igual que en nuestro país, forma parte de la tradición familiar.
La influencia de la gastronomía española en la utilización del membrillo en estas regiones hace que sus recetas más comunes sean similares a las nuestras, pero por supuesto hay excepciones. Destaca el membrillo de la región de San Juan, a los pies de los Andes, conocido como el membrillo rubio y que se beneficia de las particularidades de un ecosistema único. Con él se elaboran recetas típicas como las sopaipillas, unas tortas fritas rellenas, y las tortillas jachalleras, unas bolitas con sabor a anís que se consumen junto con el mate.
El membrillo en España
España es el país europeo que más membrillo produce y está considerado entre los mejores del mundo. Aunque se extiende por todo el país, la región mediterránea es la más productiva; el clima cálido y húmedo de esta zonas,propicia que los frutos alcancen un punto óptimo con el fin del verano. Desde hace generaciones, la recolecta del membrillo y su posterior uso en la cocina, ha cautivado a miles de familias.
En Santa Teresa el Membrillo es, junto a las Yemas de Santa Teresa, el emblema de nuestra gran familia. Lo elaboramos solo a partir de fruta fresca, recogiendo la esencia de la receta tradicional y sin añadir ningún tipo de conservante ni aditivo artificial. Te invitamos a visitar nuestra web y descubrir el auténtico Membrillo Santa Teresa en todos sus formatos, tradicional, en lonchas, con nueces, para untar… ¡seguro que hay uno para ti!